El punto de partida para llevar cabo la síntesis de nuevos agentes antivirales en este proyecto es la proteína S (spike) de la superficie del coronavirus SARS-Cov-2, responsable del proceso de fijación a la célula huésped y posterior proceso de fusión.
El diseño de nanotransportadores de estructura dendrítica que incorporen a su esqueleto secuencias peptídicas o aptámeros que interaccionen con dicha proteína y bloqueen el proceso de infección es la base de este proyecto, bien mejorando la solubilidad y biodisponibilidad de estos AVP o aptámeros, o bien por el posible establecimiento de efectos colaborativos o sinérgicos derivados de la actividad antiviral que ambos sistemas presentan por separado.
